Ha sido bonito ver cómo la cuarta generación de la familia de Julio Bouchon ha apostado con cariño por sus tierras del Maule. Y no es para menos: Mingre, el campo familiar que se ubica en plena cordillera de la costa, es una joya, tanto por sus viejos viñedos como por la historia que encierran las paredes de su antigua casona. A su País Salvaje, ahora la bodega agrega un rico espumante de país-cinsault (me parece que elaborado con el método charmat) a un muy buen precio ($7.000).

Lo que más me gusta de este Extra Brut hecho con variedades típicas del secano sureño, es que se suma a los espumantes con identidad chilena, algo que tímidamente empezó Miguel Torres con su Estelado, y que hoy –si tuviera un nombre genérico que identificara la categoría– debería ser la carta de presentación de nuestro país en materia de burbujas.

Con apenas 11,5º de alcohol, presenta un matiz rosado muy pálido, burbujas finas y una buena estructura. Combina sutiles aromas y sabores de frutos rojos frescos con duraznos y peras, además de un matiz floral. Sólo se hicieron 6.000 botellas de esta primera versión.

Fotografías de Harriet Nahrwold (©)